Necesitaría ser un pulpo

Me gusta la sensación que tengo desde hace 2 meses. Tengo demasiado que aprender y mejorar, demasiadas cosas pendientes que hacer, demasiada gente con la que hablar, demasiadas cosas que mejorar, investigar o perfeccionar que duermo sólo lo necesario.

Hacía tiempo que no me pasaba y (creo que) empezaba a ser un problema. Cuando tienes tiempo casi de aburrirte o sencillamente te descubres en ocasiones sin nada que te impida irte a la cama sin remordimientos porque dejas cosas pendientes, es que algo pasa. Tu mente no tiene todo lo que necesita para estar felizmente ocupada con trabajo, placer o ambos a la vez.

Desconecto el cerebro tarde no porque quiera parar, sino porque se que tengo que hacerlo. Me despierto antes de que suene el despertador y aprovecho para hacer cosas antes de desayunar y activarme oficialmente.

Creo (y espero) que esto durará unos meses. Mi intención es que no pare durante al menos 40  o 50 años, por decir una cifra. Me gusta tener mi mente ocupada, estresada, con cosas pendientes. Odio las etapas en las que las cosas son tan relajadas o rutinarias que acabas desperdiciando el tiempo en el sofá.

Adoro tener tanto que aprender que siento que no me da tiempo. No me genera ansiedad; hay que saber medirse. Creo que estoy aprendiendo. Pero necesitaría que el día tuviera más horas.

Pero hace unos días estuve en el acuario en Bray y tuve una idea. ¿Y si tuviera más de 2 brazos y pudiera hacer una cosa distinta con cada uno? Querría ser un pulpo; necesitaría ser un pulpo. Eso sí que sería multitasking.

Brazos de pulpo

Cabeza de pulpo

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *