MI MADRE ES BLOGUERA

Señoras, señores… ya puedo decir esto públicamente: ¡¡Mi madre es bloguera!! Lo he conseguido. Por fin. Lo intenté animándola por las buenas, pero no dio resultado. Se la tenía guardada para el día de reyes y, entre todos los demás regalos, le colé un blog. Me encantó eso de regalar un blog.

 

Aunque pueda llegar a parecer un regalo algo cutre, a ella también le gustó. Por las buenas, le daba un poco de pereza crearse uno; pero por las malas, ha aceptado entusiasmada el reto de convertirse en bloguera. El título lo elegí yo, aunque no se si lo cambiará algún día. «Aprovechando la coyuntura» se convierte desde ahora en su pequeño rinconcito en la red. Siempre me hizo gracia todo lo que ella usa esa frase cuando quiere mandarte a hacer algo que seguro no te va a apetecer….

 

Está como un niño con zapatos nuevos. Incluso ya ha experimentado sus primeros problemas con wordpress (borrar un post y tener que repetirlo, superar el paso de cómo enlazar las fotos desde flickr…). Se queja un poco porque dice que ¿qué ha hecho ella para merecer esto? pero en el fondo sabe que yo sólo le he devuelto la pelota.

 

Dice que lleva con agradable peso su regalo de reyes. Está como un torero al salir de la plaza antes de una corrida. Acepta el reto de postear y asegura que no piensa abandonar. La verdad es que algo de reto sí que tiene; hasta ayer no tenía ni idea de cómo se hace un blog y se limitaba (como buena madre) a visitar el mío.

 

Pero acepta que tiene lo que se merece. Es lo que tiene criar a hijos hiperactivos y con inquietudes. Tanto estimularnos para ser vivos, para tener hobbies, para intentar ser buenos en aquello que nos gusta, para probar lo nuevo…

 

Cada uno lleva su cruz. La mía ha sido salir una culo-inquieto que se apunta a mil cosas, que no para de maquinar, de pensar en qué más le queda por aprender, de apuntar cosas en la lista de lo que le gusta, de empaparse de todo lo que puede,… ¿De dónde vendría si no mi hiperactividad con tocar el oboe, la guitarra, estudiar sociología en mis ratos libres, estudiar inglés, apuntarme a los cursos que pillo, el gimnasio, el blog, los viajes? ¿Por qué si no me animó a estudiar periodismo en Madrid cuando me podía haber quedado en Sevilla, a conocer a más gente, a abrir mi cabeza? Y me ahorro nombrar lo que tengo pendiente como la fotografía, más viajes…..

Como decía, cada uno lleva su cruz. La suya ahora es convertirse en bloguera. Suerte y bienvenida.

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