LOCURA EN TIEMPOS DE HUELGA….

Estamos en época de crisis. A estas alturas ya es algo evidente. Pero intentar solucionar un periodo de vacas flacas con huelgas violentas no me parece que sea la solución más adecuada. Hay que quejarse, pedir y buscar los cambios necesarios, pero al mismo tiempo que tratamos de empujar esto hacia arriba entre todos.

Además, está cristalino que la crisis existe, pero ¿en este país todas las crisis de todos los sectores se tienen que solucionar con la subvención del gobierno? Permítanme que discrepe. El gasoil está caro y eso afecta a transportistas, pescadores y muchos otros agentes sociales. Pero también está cara la leche, el pan, el aceite y hasta los folios que usamos para trabajar -por poner un ejemplo absurdo-. Que yo sepa, al menos de momento, mi jefe no ha decidido negarse a trabajar porque cada papel que imprima le salga un 10% más caro que el año anterior.

Y la subida del gasoil y los precios en todo el mundo ¿es culpa del gobierno? ¿es algo que el gobierno tenga que subvencionar?

Repito, hay que quejarse y pedir soluciones, pero también buscar esas soluciones entre todos y no esperar que el gobierno en exclusiva solucione la papeleta. Esto lo ha explicado mejor Rafa que además nos ha dejado este video de Negopolis.tv.

Por otro lado, empezamos a ver la locura en tiempos de huelga. Los coches hacen largas colas en gasolineras, los estantes de los supermercados se vacían y ha muerto un hombre atropellado en Granada. Por si fuera poco, un camionero ha resultado herido grave al salir ardiendo su vehículo en Alicante.

Tiene quemaduras de segundo grado en el 60% de su cuerpo. Dormía plácidamente en el interior de su camión cuando éste ha salido ardiendo. Casualmente, se encontraba estacionado en un lugar próximo a una gasolinera y en el que ayer se registraron enfrentamientos entre piquetes y policía.

Entiendo las protestas de los piquetes, pero si de verdad han prendido fuego a camiones a las 4 de la mañana sabiendo de sobra que muchos camioneros tienen la costumbre de dormir en sus vehículos, es que la huelga está desquiciando a muchos.

NO SEAMOS VAGOS… TRABAJEMOS MÁS….

Desde ayer estoy indignada. Parece que todavía no trabajamos bastantes horas al día. Es insuficiente empezar en la oficina a las 9 de la mañana y salir a las 7 de la tarde (eso sin contar por supuesto las horas extra que nos quedamos con demasiada frecuencia). Me resulta una auténtica ironía que pretendan ampliar nuestras horas de trabajo. Vamos a tener que limitarnos a vivir para trabajar y dejaremos los domingos para nuestras familias, amigos, parejas, ocio, entretenimiento, descanso, relax… Total, ¿para qué necesitamos más? Toma patada en los huevos (ups, perdón. Se me escapó).

La Unión Europea ha aprobado un acuerdo que permitirá ampliar la jornada laboral hasta las 60 horas semanales. Hay quien todavía nos dice que no tenemos por qué alarmarnos. Total, lo único que rompe es un derecho social consagrado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) hace 91 años. Poca cosa. Es que somos muy exigentes.

Ahora no se llevan los derechos de los trabajadores, sino el opting out británico. Mola más para las derechas europeas. Éste es el sistema que ha ejercitado el Reino Unido desde el año 1993 y permite que cada trabajador pueda pactar con su empresario libremente el tiempo de trabajo. Ahora se va a convertir en norma general europea. ¡¡Vivan los avances sociales!!

Lo único que me consuela es que España se ha opuesto desde el principio a una norma que ha necesitado seis intentos y cuatro años de negociaciones para salir adelante. La iniciativa estuvo desde el principio bloqueada por España, Francia e Italia. Pero claro, ha sido llegar Sarkozy y Berlusconi y se han ido todos los derechos sociales al cubo de la basura.

De todos modos, no se me alarmen. Tranquilos. Que dicen que hay contempladas salvaguardas para garantizar que el opting out sea aceptado por los trabajadores voluntariamente y no forzados por temor al despido. Sólo tendremos que firmar un bonito consentimiento por escrito para trabajar más de 48 horas y renovarlo cada año.

Bueno, ahora ya me veo más protegida. A ver si lo he entendido bien. La norma no me obliga sino que es voluntariamente aceptada. O sea, que si ahora ya me cuestra bastante sudor salir de la oficina más o menos a mi hora y llevar un ritmo de trabajo que no me ahogue demasiado (como máximo salir a las 9 de la oficina, algún sábado currando y peticiones de varios clientes que atender con máxima urgencia y prioridad), después sólo tengo que contarle a mi jefe que a mí no me va el opting out y me dejará a mi libre albedrío.