Después de anécdotas variadas (y por cierto, bastante peculiares) desde mi llegada a Sevilla, por fin ha llegado el día en que una servidora empieza a mejorar y prosperar en la vida. Ahora…. ¡¡SE HA COMPRADO UN COCHE!!
La espera ha sido larga y el camino desde mi marcha de la capital duro (empecé como sabéis por un compañero de piso que me robaba, después una compañera con la profesión más antigua del mundo y terminé con el robo de mi bicicleta tan sólo unos días después de comprármela. Todo eso sin contar con la compra frustrada de un piso a cuyo dueño tengo que llevar a juicio para que me devuelva la señal), pero ahora llega la recompensa.
Tengo que decir no sólo que mi nuevo utilitario es magnífico, sino que dará que hablar este verano estando presente en todos los puntos claves estivales y su asistencia a cualquier fiesta popular que se precie. Además, ya está siendo adoctrinado para ser merecedor de soltar por sus altavoces sones tan conocidos en estos eventos como Chocolate sexy, el Chivi, Camela, Rafaella Carrá o Manzanita. Por supuesto, por encima de todos estará don Manuel Lombo a cuyos conciertos asistiremos para apoyar a nuestro músico y su Rolando.
Además, espero que pueda hacer algún que otro viajito rumanil a Madrid, para lo que tendré que empezarle a enseñar el himno de la rhumanía y la canción de los dientes de oro. Tampoco podremos olvidar a Wilfrido Vargas y su mítico «¿Qué hiciste abusadora? ¿qué hiciste abusadora?»…
Por supuesto, ayer nada más que me lo dieron, mi querida Zapat y yo hicimos lo que se esperaba: nos fuimos de inmediato a Gines a casa de los picudos Pilar y Jose a enseñarles el new car. Eso sí, yo lo que espero con más ansia es el glorioso momento en que pueda ir en mi nuevo coche con Nani y su novia a recoger a Juanito… Señor ministro ¡¡eres el único que queda con esta combinación: NO novia y No coche!!
Lo dicho, el RHUMANO MÓVIL o el POLLO MÓVIL (como prefieran llamarlo) promete. La era del Skoda Fabia ha llegado. Desde aquí pido perdón al dueño de Renault por haber abandona la tradición de comprarme un CLIO…
PD1 Aunque prometo poner fotos reales, debo matizar que el coche en cuestión no es negro como aquí se observa sino gris satén (vamos, un gris azulado).
PD2 Obvios agradecimientos a la Tere (la que viene siendo mi madre) y el Chico (el que viene siendo Don José Manuel Romero). Jajaja.