SUFRIR COMO UN PERRO

Giovanni Nuvoli era italiano y tenía 53 años. Llevaba enfermo desde hacía 7 años y vivía postrado en una cama por su esclerosis lateral amiotrófica desde entonces.

El pasado mes de abril pidió morir de una manera digna. Quería que le dieran un sedante y desconectaran el respirador artificial que le mantenía con vida.

Le negaron ese derecho. Parece que todo estaba dispuesto para que un anestesista hiciera caso a su petición; pero la policía intervino. Como protesta, Nuvoli dejó de comer y beber. Ahora ha muerto después de una huelga de hambre y sed en su casa en Cerdeña.

Su mujer ha dicho que Giovanni «sufrió como un perro» antes de morir. El europarlamentario Marco Cappato también ha dicho que «ha muerto de una manera indigna por una decisión obligada del Estado italiano«.

Al menos, esta muerte ha servido para reabrir de nuevo el debate sobre la Eutanasia en Italia. Ahora vuelve el planteamiento de introducir lo que llaman «testamento biológico o vital», una especie de declaración personal de cómo cada uno quiere ser tratado en caso de sufrir enfermedades crónicas. Esperemos que se empiece a legalizar de una vez por todas el derecho a la muerte asistida.

DORMIR EN IKEA

Ikea tiene claro su posicionamiento. Quieren que la gente les vea como la manera más económica de dar vida a su casa y aprovechar el dinero de la mejor forma posible. Además, animan a la gente a que sea imaginativa y que hagan en casa lo que les plazca para ser felices.

En España innovaron con la idea de «Bienvenido a la República independiente de tu casa». La empresa es la primera en aplicarse eso de ser imaginativo, novedoso y sorprendente.

La compañía sorprende ahora con una ingeniosa acción de marketing en Noruega. Convierten las tiendas de Ikea en improvisados hoteles durante unos días. Durante una semana, 30 clientes de Oslo podrán pasar la noche en la tienda.

Para conseguirlo, los clientes deben rellenar una instancia en la que deben explicar por qué quieren dormir en Ikea. Los elegidos pueden entrar a partir de las 10 de la noche. Un albornoz y unas zapatillas, con el logo del Ikea Hostel, serán entregados a los huéspedes como regalo. Durante la noche podrán hacer un tour especial por la tienda, en la que se seguirá trabajando a pesar de la presencia de los invitados.

No es que el departamento de Marketing se haya vuelto loco. Las cuatro tiendas de Ikea en Noruega están en las cuatro ciudades más grandes, todas ellas en el sur del país. Sabemos que la gente del norte incluye una Ikea como parte de sus vacaciones. El Ikea Hostel hace que el destino sea completo.