JUNO

El domingo fui al cine a ver «Juno«. Tenía muchas ganas. Es una de las pocas películas, junto con «En el Valle de Elah» (la tengo pendiente aún), de las que me han hablado muy bien en las últimas semanas. Salí contenta de la sala. Me encantó. En mí, siendo una comedia, es un éxito doble puesto que este género no es uno de mis fuertes.

 

Buceando por blogs, encuentro una descripción que le viene como anillo al dedo. Juno es «una de esas películas pequeñas y sencillas que logran mucho más que entretener«.

 

Cuenta la historia de una adolescente de 16 años que se queda embarazada. Tras darle un par de vueltas, decide tener al bebé y entregarlo en adopción a una pareja deseosa de tener un niño. Ése es todo el argumento de una cinta que se mueve entre la comedia y el drama. El resto de la película gira en torno a esa idea y a una protagonista que hace una interpretación de su papel fascinante. El guión y los diálogos son igualmente geniales.

 

Algunos critican la benévola respuesta de los personajes ante una situación drámatica. Dicen que son demasiado complacientes y los diálogos artificiales. Sólo en parte, puede que tengan razón. Sin embargo, lo que es indiscutible para cualquiera es el gran retrato de personajes que hace la cinta y la exquisita interpretación de Ellen Page de lo que alguno ya ha dicho que es un pequeño gran personaje femenino.

Si aún no habéis ido a verla ¿a qué esperáis?

Receta para ganar las elecciones

He estado curioseando un rato por la página de Forges. Para quien le guste, altamente recomendable perderse un rato por las múltiples «paridas» que tiene colgadas.

 

Deja una receta para los políticos de Cómo ganar las elecciones.

1. Atuendo Emilio Chuchi con su correspondiente sonrisa

2. Tres porciones de propuestas irrealizables (aunque se asegure lo contrario)

3. Un porrón de cartelitos enganchados a todas las farolas del país

4. Media hora en cada informativo explicando lo mismo de mil maneras diferentes

5. Cientos de besos a niños y madres en mercados y/o plazas municipales

Se baten bien las propuestas del contrario con otras más sonadas, se deja macerar la mezcla el día de reflexión y se sirve la victoria bien fría (si hay motivos de venganza) o bien caliente (si no puede uno reprimir su ilusión).

 

Lo único que me ha decepcionado de Forges es la receta que da de cómo hacer un blog… Con lo bien que iba conmigo…