Como sabéis, los lunes siempre se me hacen muy cuesta arriba. Pero cuando se va acercando el ocio del fin de semana, se me ilumina la cara. Normal ¿cómo no? Y si es un fin de semana tan largo como éste que nos dura 4 días, más todavía si cabe.
Sevilla es una delicia en esta época. Sol, buen tiempo, olores, sabores, cervezas, terrazas, tapitas, paseos, sentarse a la sombra, respirar hondo, el río, los amigos, las copas…. Todo sabe y suena mejor en Sevilla en primavera.
Hace sólo 3 días que se fueron Tefa y Jose después de pasar un genial fin de semana. Y esta tarde me llega otra esperadísima visita. Tendremos por aquí a Nata y Diego para disfrutar de la ciudad y el tiempo libre. Estoy deseando.
Volveremos a patearnos las calles, a pelearnos por pedir una cerveza fría, a decir que no podemos comer más, a tomarnos un helado en Rayas, a beber unas copas al lado del río, …..
Feliz puente a todos y, si no escribo por aquí antes, nos leemos a la vuelta.
Hasta entonces, decidme… ¿qué cosas nunca dejaríais de enseñar a alguien que viene de visita?