Al principio me costó un poco ponerlos de acuerdo y lograr que se llevasen bien. Pero después de un par de ajustes de cables y entradas y livianas negociaciones, he conseguido que la tele y el EEE se pusiesen de acuero.
Así es como el pequeñín se hizo grande. A partir de ahora, ver las pelis en el sofá será tarea rapidísima.
Lo acabo de ver en boliazul y no he podido parar de reirme. Un padre graba a su hijo justo cuando acaban de salir del dentista. El chico está todavía bajo los efectos de alguna anestesia y parece andar algo «drogado».
La conversación que mantiene con el padre no tiene desperdicio. Empieza diciéndole que se siente muy bien («I feel good») y a continuación le pregunta extrañado si esto es la vida real («Is this real life?»).
A partir de ahí, empieza a decir cosas raras…. «Ok.. now I have two fingers… or… four fingers…. I can´t see anything…»
Al final, desesperado le pregunta al padre por qué le está pasando eso («Why is this happening to me?») y si va a durar para siempre («Is this going to be forever?»)
Por suerte, el padre lo alivia diciéndole que sólo es la medicina («It´s ok boy … It´s jus from the medicine»).