TOMATES VERDES FRITOS

Me gustan los tomates. Mejor dicho, me encantan los tomates. Desde el domingo tengo ganas de probar unos tomates verdes fritos. Si me lo he aprendido bien, necesitaré tomates verdes, harina, pimentón dulce, pimienta molida, huevos, aceite de oliva y mucha inspiración en la cocina.

Pero que nadie se preocupe, no me voy a poner a hablar de recetas de cocina. Para eso ya tenemos a Arguiñano, Arzak o Ferrán Adriá. Por cierto, ¿le cabe a Arguiñano un poco más de publicidad en su web? Madre mía…

Tengo antojo de tomates desde que el domingo vi por primera vez la película «Fried Green Tomatoes at the Whistle stop cafe«. Vale… lo confieso…. en 25 años de vida todavía no la había visto. Pero nunca es tarde. Supongo que para algunos esto será poco menos que un «pecado» y a otros les dará envidia que haya podido disfrutar de la cinta por primera vez -como le pasa a Andrés cuando le recuerdo que todavía no he leído Rayuela o Cien Años de Soledad-.

Me gustó. Bueno, hoy estoy dubitativa… Me encantó, a pesar de ser una historia bastante sencilla. La película dirigida por Jon Avnet está basada en una novela de Fannie Flag, quien escribió además el guión de la película junto a Carol Sobieski.

Nos cuenta la vida de una mujer llamada Evelyn y los cambios que se originan a partir de su encuentro con una anciana recluida en un asilo llamada Ninny.

Evelyn es una mujer sin autoestima, acomplejada, tímida, que se refugia en la comida para salir de sus problemas, y que intenta salvar su matrimonio con un hombre que hace bastante más caso a la televisión, las alitas de pollo fritas y el beísbol que a su mujer.

A raíz de la fascinante historia que le cuenta Ninny, este personaje se va transformando hasta convertirse en «Towanda»… una mujer segura, confiada y amante de la vida. Y es en esta historia que se relata donde está el argumento central de la película.

Jon Avnet logra recrear la novela de tal modo que casi no tenemos que interpretar lo que vemos, nada explícito, nada sobreentendido, pero todo reflejado de manera sutil, casi pudorosa llevando con maestría las líneas magistrales de la novela.

La película toca temas como los malos tratos, el racismo y el lesbianismo (sólo insinuado en la cinta y más explícito en el libro) y, en suma, relaciones humanas tocadas con sensibilidad, humor y misterio.

Si aún no la has visto, ¿a qué esperas?

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6 comentarios

  1. Hola, que tal??

    Esa película la he visto unas cuantas veces. Me encanta. ¿Como era el grito de guerra?? Towanda??. Estupenda película. Además siempre la voy a asociar a Sevilla porque cuando vine aquí a vivir, hace unos 4 años, trabajaba en una biblioteca y tenía muchas películas de vídeo en VHS, y una de ellas era Tomates verdes fritos. Me traje mi vídeo de Úbeda y lo instalé en mi pisito de Sevilla y fue la primera peli que saqué de mi biblioteca, y mi compi de piso y yo la vimos dos días seguidos.
    Pásate por esa biblioteca (Instituo Andaluz de la Mujer, calle Alfonso XII, también abren por las tardes) si tienes tiempo y ves las pelis que tienen (ya por supuesto en DVD).

  2. Te confieso que tengo en mi casa ‘Tomates verdes fritos’ en VHS desde hace cien años y nunca me ha llamado la atención. La veré, antes de que mi padre tire de una */*¿¿¿¿!!*** vez el viejo vídeo.

  3. Una película bonita, ¡llena de buenos sentimientos y de valores bien entendidos! La vi en el extinto cine Catalunya en Barcelona, otra en los cines Melià, que se caían a trozos, y alguna vez más en la tele.

    ¡Qué tiempos aquellos!

  4. Una pelicula que a me removio bastante por dentro, y sobre todo la primera de las cuatro historias, es «Mujer contra Mujer».
    Me gusto mucho, pero la primera historia, me llego muy hondo, y sobre todo si has pasado por una situacion igual.
    Que decir de Tomates verdes fritos, GENIAL

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