Creo que esto volverá a traer polémica y probablemente me dejará en mal lugar, pero me ha alegrado la noticia. Como muchos saben, me considero cristiana pero estoy muy alejada de la Iglesia que tenemos actualmente. Una Iglesia alejada de casi todas las realidades sociales y que se queda cada vez más anticuada en sus pensamientos, anclada en el pasado, retrógrada en sus pensamientos.
Leo en El País que El Consejo de Europa defiende que el aborto es un derecho. La libertad de las mujeres para decidir sobre su propio cuerpo debe ser respetada y los Gobiernos tienen que garantizar que la interrupción voluntaria del embarazo sea una práctica accesible y segura. Así de contundente, asumiendo las tradicionales revindicaciones de las asociaciones feministas, se ha pronunciado el Comité de Igualdad del Consejo de Europa -formado por 47 países europeos- en un informe aprobado por amplia mayoría y hecho público ayer.
En el caso de España, uno de los pocos países europeos que no tiene una ley de plazos, los principios proclamados en el informe del Consejo de Europa no se cumplen. El aborto está despenalizado en tres supuestos, pero no es un derecho reconocido; está dentro del Código Penal. Las mujeres no tienen libertad para decidir, sino que son los médicos los que señalan si la mujer está dentro de alguna de las indicaciones legales. Y no en todas las regiones se puede interrumpir el embarazo fácilmente: en Navarra, por ejemplo, no hay ningún centro público ni privado que lo haga, así que las navarras tienen que trasladarse de comunidad autónoma cuando desean abortar.
El informe del Consejo de Europa, que será debatido en el pleno de la Asamblea Parlamentaria el mes próximo, invita a despenalizar el aborto en todos los países europeos y a mejorar las condiciones de acceso.
Noticia publicada en El País 19.09.08. Mónica Belaza.
Lo del aborto es un tema muy complicado. El tema que esgrimen los provida es que no es sólo un derecho para que una mujer decida sobre su propio cuerpo, sino también sobre el de otra persona. Y en eso se puede estar más o menos de acuerdo, pero desde luego no es algo que podamos tomarnos a la ligera.
Elegir si otro debe o no vivir no puede plantearse así. ¿Tengo derecho a decidir sobre la vida de otra persona? Entonces es justificable la pena de muerte y cualquier otro modo de extinción de una vida humana en cualquiera de sus fases si el fin es «bueno». Va a ser difícil que encuentres una justificación en el pensamiento cristiano para la muerte de un inocente. La «Didajé» (un documento de los primeros cristianos, contemporáneo de los mismísimos evangelios) venía a decir: «no matarás al niño en el seno de su madre», la costumbre de deshacerse de embarazos no deseados se ve que es muy antigua, no es algo moderno, sino un barbarismo que renace cuando los pueblos entronizan en egoísmo y la ley del más fuerte.
Por supuesto soy consciente de que éste es un tema muy complicado y es cierto eso de que, tal y como está la Iglesia ahora mismo, no encontraré justificación para esta práctica en el cristianismo. Pero creo que las cosas deben evolucionar y desde mi punto de vista hay ocasiones en las que se deben apoyar ciertas prácticas.
Además no estoy de acuerdo con que este tema sea equiparable a la pena de muerte o cualquier otro modo de extinción de la vida humana. Son cosas muy diferentes.
Para mí la clave está en los derechos que debe tener un madre a decidir si la vida que puede ofrecer a su hijo es la que quiere o no; y de no ser así, no tener al niño. Ni que decir tiene que el aborto porque sí no es lo que apoyo y menos lo que algunos me han dicho de que el aborto no puede ser un método anticonceptivo. Por supuesto que no.
Gracias por vuestros comentarios. Saludos.
Me alegro de alguna cosa que precisas en tu comentario:
-El aborto NO es un método anticonceptivo, si no quieres tener un hijo, abstente o usa un método que prevenga el embarazo.
-Una vez concebido, destruir el feto es destruir una vida humana en una de sus fases de desarrollo. No es como la pena de muerte, al reo se le juzga, al feto ni siquiera eso. Es peor.
-Esté como esté la Iglesia, dudo que el evangelio «evolucione» a ver aceptable el aborto en ningún supuesto, hay valores que como «evolucionen» estamos perdidos.
-¿Hay situaciones en que el aborto puede estar éticamente justificado y legalmente reconocido? Hay que establecerlos con mucho cuidado. Tal vez el supuesto en el que hay que elegir entre dos vidas y cualquier elección acaba con una de ellas (madre-hijo o hermano-hermano, por ejemplo).
-¿Se debe aceptar la eugenesia? Humm, tal vez en casos muy extremos (anencefalia), el resto de caso recuerda la eugenesia nazi.
-¿Violación? Crudo conflicto de valores, ahí me quedo un poco en suspenso, pero sigo pensando que hay una vida inocente junto a una vida destrozada en juego. ¿Ayuda a paliar el destrozo de la vida materna el aborto del hijo concebido…? Ya digo, me quedo en suspenso.
En fin, así está la cosa.
Saludos.