Antes o después, todos pasamos de moda. Los juguetes antiguos en los tiempos que corren lo tienen difícil para conquistar a los niños. Muchos de los que fueron juguetes de nuestra infancia andan cogiendo polvo por algún rincón de un armario. Pero en su día fueron grandes compañeros de viaje.
Me ha encantado el título que has puesto… Moeh siempre se reía de mi al escucharme decir hace años que uno de mis miedos era para pasar de joven promesa a vieja gloria.
Jajaja. Moeh es que directamente quería pasar a vieja gloria 🙂
Jeje, yo tengo una buena tropa de viejas glorias, y eso que mi madre jubiló a alguno que otra en su momento. Pero la verdad es que… da tanta pena deshacerse de ellas…
Saludos.